No intentes medir tu conocimiento con el de otra persona, la verdadera sabiduría consiste siempre en ir más allá de tus límites.
La verdadera felicidad consiste en amar lo que haces y hacer lo que amas.
Porque bien dice alguna frase escondida por ahí que leí una vez, si la vida te pone muchas veces frente a una situación es porque no has aprendido algo que tenias que aprender.
Es cobarde poner palabras en la boca de los demás, además de ser una mentira para los demás, es una mentira para ti mismo.
Las personas van a hablar de ti siempre, si no te dan de comer, no importa.
Respeta siempre las ideas de los demás, habrá veces en que podrás probar lo que tú piensas, habrá veces en que no podrás hacer a las demás personas cambiar de idea, no importa, respeta cualquiera de las dos situaciones.
Si piensas algo de “tal” o “cual” persona, resérvate tus comentarios, las cosas siempre caen por su propio peso.
No esperes nada de las demás personas, por que cuando te defraudan o tu defraudas a las demás personas, es tu culpa por esperar cosas que no sabes si pueden ser cumplidas.
No envidies a los demás, confórmate con lo que tienes, pero sueña siempre con mas, porque cada quien, al final, recibe lo que se merece.
Usa todo el dinero que tengas en la bolsa, el dinero es una de las cosas que no te podrás llevar cuando tu tiempo se haya terminado aquí.
Grita, llora, mienta madres, enójate, ríe, se feliz, la vida se trata de eso, no te preocupes por lo que hagan los demás, preocúpate en hacer las cosas lo mejor que puedan ser hechas y siéntete satisfecho por eso.
Vivir la vida de los demás nunca te dejara ser una persona plena, libérate de las cargas que llevas, complejos, inseguridades, mascaras… Solo eso te asegura ser feliz cada día.
